Hotel Riberies, Llavorsí

El hotel tiene una ubicación fantástica, ideal para disfrutar de actividades al aire libre y paseos por las montañas. Las habitaciones son cómodas y limpias, aunque necesitan una renovación. El servicio es muy amable, especialmente la recepcionista Mariona, quien nos ayudó en todo. Sin embargo, la experiencia gastronómica fue algo monótona después de unos días. En general, el hotel ofrece buen valor por lo que cuesta, pero no todo es perfecto.

El hotel tiene una ubicación fantástica para disfrutar de paseos por las montañas y para diversas actividades al aire libre. Las habitaciones son limpias, pero hay que mencionar que tenían techos inclinados, lo que dificultaba un poco la experiencia. El servicio fue muy amable, especialmente Mariona en recepción, siempre dispuesta a ayudar. Sin embargo, la experiencia gastronómica no fue la mejor, ya que se volvió monótona después de unos días. En general, una buena relación calidad-precio, aunque hay algunas áreas que podrían mejorar.

El hotel tiene una ubicación excelente, ideal para disfrutar de paseos en la montaña y actividades al aire libre. Las habitaciones necesitan una renovación, lo que es decepcionante para un hotel de cuatro estrellas. El servicio fue muy amable, especialmente la recepcionista Mariona, que nos ayudó en todo momento. La experiencia gastronómica se vuelve monótona después de algunos días, aunque hay opciones variadas para los amantes de la carne. En resumen, hay cosas buenas y malas, pero se puede considerar por su relación calidad-precio.

El hotel tiene una ubicación fantástica, al pie de las montañas y cerca de varios lugares para visitar. Las habitaciones eran algo pequeñas y oscuras, pero después de hablar con la recepción, logramos solucionar algunos problemas. El servicio fue excepcional, con un personal muy amable y atento. Sin embargo, la calidad de la comida no está a la altura de un hotel de cuatro estrellas y el aire acondicionado en la habitación era un poco ruidoso.

El hotel tiene una ubicación fantástica al pie de dos valles, ofreciendo muchas opciones para visitar. Las habitaciones son cómodas y limpias, pero el área de la piscina cuenta con pocas tumbonas, lo que no es ideal. La atención del personal es mayormente amable y eficiente, aunque tuvimos un par de interacciones con un miembro del personal que no fueron tan amables. En general, la relación calidad-precio es aceptable, pero la oferta gastronómica es un punto débil.

El hotel tiene una ubicación excelente, cerca de muchas actividades y al pie de las montañas. Las habitaciones son cómodas y limpias, pero la inclinación del techo puede ser un inconveniente. El servicio es muy amable, especialmente la señora de recepción, pero la oferta gastronómica podría mejorarse ya que se vuelve repetitiva. En general, es un buen lugar para alojarse, especialmente considerando el precio.

El hotel tiene una ubicación fantástica, justo al pie de los valles rodeados de montañas. Las habitaciones son cómodas, aunque un poco oscuras y necesitan renovación. El servicio fue excelente, con un personal muy amable y atento. Sin embargo, la experiencia gastronómica dejó un poco que desear, especialmente en cuanto a la variedad del desayuno, lo que fue decepcionante para un hotel de 4 estrellas.

El hotel tiene una ubicación fantástica, justo al pie de las montañas, lo que ofrece muchas oportunidades para actividades al aire libre. Las habitaciones son cómodas, aunque un poco extrañas con techos inclinados. El servicio es amable y servicial, especialmente la señora de recepción, pero no siempre se mostraron igual de atentos. La comida, aunque buena al principio, se volvió algo repetitiva. En general, creo que el hotel es una buena opción para actividades al exterior, pero la experiencia podría mejorar con un mejor servicio y una variedad más amplia en el comedor.

El hotel tiene una ubicación fantástica, justo al pie de las montañas, ideal para quienes disfrutan de actividades al aire libre. Las habitaciones eran aceptables, aunque con poco espacio en las tumbonas de la piscina. El servicio fue mixto: algunos empleados eran muy amables y útiles, mientras que otros parecían un poco estresados. En general, no es una experiencia perfecta, pero aún así vale la pena por la ubicación.

El hotel tiene una ubicación fantástica, ideal para escapadas diarias y rodeado de montañas, lo que lo hace perfecto para quienes disfrutan de actividades al aire libre. Las habitaciones eran cómodas y limpias, aunque algo pequeñas y necesitadas de renovación. El servicio fue amable y muy servicial; especialmente Mariona, quien nos ayudó con todo lo que necesitamos. Sin embargo, la experiencia gastronómica no fue la mejor, ya que las opciones eran limitadas y un tanto repetitivas en el desayuno. En general, creo que ofrece una buena relación calidad-precio, pero hay aspectos a mejorar.